Quién en esta vida no ha tocado una puerta buscando ayuda y esta jamás se ha abierto?
Existen manos que tocan las puertas, mas estas no se abren,
hay quién tiene sus manos ensangrentadas de tanto tocar.. mas aún así, a nadie le interesa abrir...
Está el que pierde la esperanza, creyendo que por mucho que toque,
no existirá la posibilidad de escuchar el sonido del abrir
o el leer algo parecido a: Entra, estoy aquí para lo que necesites..
mas aún así, te digo, no pierdas nunca la esperanza de que la puerta mas importante se abra para ti
la puerta de Dios
Esa nunca se cerrará ante tu dolor, ante tu tristeza.
Jesús no ha nacido para recibir de nadie nada..
El ha nacido para darnos a todos todo,
todo aquello que necesitamos tener en esta vida.
Una salvación, una sanidad, un bendición,
El siempre te escucha, siempre abre para que entres,
para que le expongas tu dolor, tu queja, tu preocupación.
NO dejes de tocar, No dejes de tocar Su puerta
Poco interesa si aquellas pasadas nunca se han abierto,
recuerda: Esas, nada pueden hacer, nada te podrán dar.
siempre tendrán limitaciones,
Solo una puede dar aún más de lo que esperamos, de lo que creemos recibir..
Solo la puerta de Dios, es la que permanece abierta,
es esa la que nunca se cierra,
mas siempre está abierta
esperando dar aquello
que tanto deseas recibir
no es limitada, nunca busca dar para recibir en cambio
en ella recibes, sin tener que dar
en ella nunca leerás, No puedo, no tengo tiempo, no estoy
porque El, siempre está
Señor, hoy toco tu puerta
en ella recibes, sin tener que dar
en ella nunca leerás, No puedo, no tengo tiempo, no estoy
porque El, siempre está
Señor, hoy toco tu puerta
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